Nuestro primer producto fue un jabón. Una receta tradicional, recuperada de la abuela: Jabón de Avena y Romero.
Fue probarlo y darnos cuenta de que era una joya que no podía desaparecer. El conocimiento pasado de generación en generación es valioso desde antaño, y hoy en día hay que ponerlo en valor.
Por eso nuestros jabones son joyas, porque son fruto de la joya de los conocimientos populares y tradicionales. Disfrutamos haciendo cada uno de ellos. Tienen todo nuestro amor, mimo y sobretodo: Ingredientes de la más pura calidad.